La entrevista telefónica

Una modalidad de entrevista que se esta utilizando cada vez más es la de la entrevista telefónica. Por razones obvias, este tipo de entrevista es utilizada cuando el Head Hunter no posee oficinas en tu ciudad, pero se esta utilizando también cuando el seleccionador tiene presencia local.

Adicionalmente al filtrado realizado a los CV recibidos, los seleccionadores realizan una segunda criba utilizando este método.

Para nosotros, los buscadores de trabajo, estas entrevistas presentan aspectos favorables y desfavorables.

Los aspectos favorables son:

- No tenemos que desplazarnos. Nos ahorramos el estrés generado al tratar de llegar a tiempo al sitio de la reunión, de los atascos, encontrar un lugar para aparcar, estar en un lugar que no “controlamos”.

- Podemos disponer de material de apoyo. Tenemos a mano toda la documentación que queramos, para poder consultar las notas que hemos preparado previamente.

- Podemos emplear mecanismos para liberar el estrés generado por la entrevista. Por ejemplo, uno puede caminar mientras habla, o se puede fumar un cigarrillo.

- Estamos en nuestro territorio. Estamos en un lugar familiar, que controlamos. Esto hace que nos sintamos más cómodos.

Del otro lado de la moneda se encuentra algunos inconvenientes:

- No existe lenguaje corporal. El lenguaje corporal transmite mucha información de la que no podemos aprovecharnos (ni ellos tampoco). La única herramienta que disponemos para comunicarnos es nuestra voz y nuestras palabras. No tenemos forma de detectar, a tiempo, si lo que estamos diciendo está siendo entendido correctamente. En una entrevista presencial es posible detectar esta situación e ir ajustando nuestro discurso en el transcurso de la misma frase.

- La calidad de la llamada puede no ser buena. Dado que generalmente son llamadas internacionales, es posible que la calidad de la línea de comunicación no sea buena (ecos, ruidos, interferencias, volumen bajo), y si a eso se le añade la dificultad de comunicarse en otro idioma, (independientemente de tu fluidez en dicho idioma), el resultado es una mayor tensión y esfuerzo para comprender correctamente las preguntas y dar una respuesta adecuada.

- La espera. Desde unos minutos previos a la hora establecida, uno está a la espera de recibir la llamada. Esperando y deseando que el entrevistador sea responsable y haga la llamada. En la entrevista presencial, en caso de error, la persona de recepción podría notificártelo al llegar. Pero en la telefónica eso no ocurre.

- No disponer de un sitio adecuado para realizar la entrevista. El sitio que has preparado para realizar la entrevista quizás no sea el más apropiado: puede haber ruido de fondo (perros ladrando, teléfonos fijos sonando, obras en casa de un vecino) o puedes tener interrupciones (alguna persona que entre en la habitación, alguien toca el timbre).

Teniendo todo esto en mente, es importante que prepares un sitio apropiado, notificar a todos los miembros de tu familia para que no te interrumpan, pegar un cartel en la puerta, cerrar puertas y ventanas.

En el sitio deberás tener una mesa en la que puedas colocar toda la documentación, ordenada y clasificada (para que puedas encontrar la información requerida rápidamente) y el ordenador encendido con los documentos electrónicos necesarios abiertos.

Recomiendo utilizar un teléfono móvil con dispositivo manos libres, ya que esto te permitirá tener las manos libres para escribir y manipular papeles. Además podrás liberar la tensión caminando.

Recuerda hablar pausadamente y realizar preguntas para asegurarte que tu interlocutor está comprendiendo adecuadamente lo que le estas diciendo.

Trata que la hora de la entrevista no sea después de comer, ya que podrías estar un poco aletargado. Una hora que me viene bien a mi es a mitad de la mañana. Esto me permite despertarme tranquilamente y preparar todo el “escenario”.

Por supuesto, prepara la entrevista. No lo dejes al azar.